Acusación de emprender una campaña cloroformante y despolitizadora
Extracto de un artículo del periodista y sociólogo James Petras publicado en la "Monthly Review" en donde saca a la luz la función que cumplen las ONG's en América Latina dentro del papel que les ha asignado el neoliberalismo.
De
cómo detrás de una aparente solidaridad se esconden sus fines
pendientes a lograr la desestructuración de los pueblos explotados.
*
Ya a principios de los 80, los sectores más lúcidos de las clases
dominantes neoliberales se dieron cuenta de que sus políticas estaban
polarizando a la sociedad y provocando descontento social a gran escala. Los gobernantes comenzaron a financiar y promover una estrategia paralela "desde abajo": la promoción de organizaciones "de base" de ideología "anti-estatista" para intervenir entre las clases potencialmente conflictivas, con el fin de crear un colchón social.
Estas organizaciones, dependientes financieramente de recursos neoliberales estaban directamente involucradas en competir con movimientos sociales por la lealtad de líderes locales y de comunidades activistas. Para la década de los 90,
estas organizaciones descritas como no gubernamentales, sumaban miles y
recibían cerca de 4.000 millones de dólares a escala mundial.
* La confusión respecto del carácter político de las ONG's proviene de su historia previa en la década de los 70 durante las dictaduras.
En
este período, las ONG's funcionaban proveyendo apoyo humanitario a las
víctimas de las dictaduras militares y denunciando las múltiples
violaciones a los derechos humanos. También fomentaban las "ollas
populares" que les permitía a las familias víctimas sobrevivir a la
primera ola de terapia de choque aplicada por las dictaduras.
Este
período creó una imagen favorable, incluso entre la izquierda, acerca
de las ONG's y éstas eran consideradas parte del "campo progresista".
Sin embargo, incluso ya entonces, los límites de la mismas eran evidentes. Mientras atacaban las violaciones de los derechos humanos perpetradas por las dictaduras locales, rara vez denunciaban a los patrocinadores estadounidenses y europeos que les asesoraban.
Tampoco hicieron un esfuerzo serio para vincular las políticas
económicas y las violaciones de los derechos humanos con el nuevo giro
en el sistema.
Obviamente, las fuentes externas de financiamiento limitaron las esferas para la crítica y la acción en defensa de los pueblos.
En
la medida en que crecía la oposición al modelo económico salvaje en la
década de los 80, los gobiernos estadounidense y europeos y el Banco
Mundial incrementaron el financiamiento de las ONG's.
Existe
una relación directa entre el crecimiento de movimientos sociales que
desafían al modelo neoliberal y los esfuerzos para subvertirlos mediante
la creación de formas alternativas de acción social a través de las
ONG's.
* El punto básico de convergencia entre la ONG's y el Banco Mundial era su compartida oposición al "estatismo".
En
la superficie, las ONG's criticaban al Estado desde una perspectiva de
izquierda que defendía a la sociedad civil, mientras que la derecha
hacía lo mismo en nombre del mercado.
En realidad, los regímenes neoliberales, el Banco Mundial y las fundaciones occidentales cooptaron y alentaron a las ONG's para socavar el Estado nacional de bienestar al suministrar servicios sociales para compensar a las víctimas del efecto de las corporaciones multinacionales.
En
otras palabras, al tiempo que, desde arriba los regímenes neoliberales
desvastaban a los pueblos inundando los respectivos países con
importaciones baratas, extrayendo el pago de la deuda externa, aboliendo
la legislación laboral protectora del trabajo y creando una masa
creciente de obreros a bajo sueldo y desempleada, las ONG's fueron
financiadas para proveer proyectos de "auto ayuda", de "educación
popular" y de "capcitación laboral" para absorber temporalmente a grupos
de necesitados para captar a los líderes locales y para socavar la
lucha antisistema.
* Desgraciadamente, muchos en la izquierda enfocaron solamente el neoliberalismo desde arriba y desde afuera (FMI, BM) y no el neoliberalismo desde abajo (ONG's, microempresas).
Una razón mayor de este descuido fue la conversión de munchos ex-marxistas
a la fórmula y la práctica de las ONG's. El antiestatismo fue el boleto
ideológico de tránsito de una política de clase a una política de
"desarrollo comunitario", del marxismo a las ONG's.
* Normalmente, los ideólogos de las ONG's contraponen el poder "estatal" al poder "local". El poder estatal se encuentra según argumentan, distante de sus ciudadanos, es autónomo y arbitrario,
y tiende a desarrollar intereses distintos u opuesto a los de la
ciudadanía, mientras que el poder local es necesariamente más cercano y
responde más a la gente.
Esto
deja fuera la relación esencial entre los poderes locales y el poder
estatal ejercido por una clase dominante, explotadora, socavará
iniciativas locales progresistas, mientras que ese mismo poder en manos
de fuerzas progresistas puede reforzar tales iniciativas.
La contraposición de los poderes estatal y local ha
sido utilizada para justificar el papel de la ONG's como intermediario
entre organizaciones locales, donantes neoliberales extranjeros (BM,
Europa o Estados Unidos) y los gobiernos de libre mercado locales.
Pero
el efecto es establecer regímenes neoliberales mediante el corte del
vínculo entre organizaciones y luchas sociales por un lado y los
movimientos políticos internacionales/nacionales por el otro.
* El enfásis en la "actividad local" le sirve a los régimenes neoliberales,
pues les permite a sus patrocinadores internos y externos dominar la
política socio- económica macro y canalizar la mayoría de los recursos
del Estado como subsidios a capitalistas exportadores e instituciones
financieras.
Así,
mientras los neoliberales estaban transfiriendo propiedades estatales
lucrativas a los ricos privados, las ONG's no formaban parte de la
resistencia sindical.
Por
el contrario, estaban activas en proyectos privados locales,
promocionando el discurso de la empresa privada (auto ayuda) en las
comunidades locales al enfocarse en las microempresas.
Mientras
los ricos acumulaban bastos imperios financieros a partir de las
privatizaciones, los profesionales de clase media de la ONG's recibieron
pequeñas sumas para financiar oficinas, transporte y actividades
económicas a pequeña escala.
* El punto político importante es que las ONG's despolitizaron sectores de la población, sovocaron su compromiso con las y los empleados públicos y cooptaron líderes potenciales en pequeños proyectos.
Las
ONG's apoyan rara vez -si acaso lo hacen- las huelgas y protestas
contra los bajos salarios y recortes presupuestales. En la práctica, lo
de "no gubernamentales" se traduce en actividades contra el gasto
público, liberando así el grueso de los fondos para que los neoliberales
subsidien a capitalistas exportadores, mientras pequeñas cantidades
gotean desde el gobierno a las ONG's.
* Las ONG's no pueden proporcionar programas universales y completos de largo plazo como
lo puede hacer el Estado de bienestar. En su lugar proporcionan
servicios muy limitados a un grupo estrecho de comunidades. Y lo más
importante, no rinden cuentas de sus programas a la gente local, sino a
donadores ultramarinos.
En ese sentido, las ONG's socavan la democracia al quitar de las manos de la gente local
y de sus funcionarios elegidos los programas sociales, para crear
dependencia de funcionarios ultramarinos, no elegidos y de funcionarios
locales ungidos por ellos.
En
contra de la noción de responsabilidad pública (el gobierno tiene que
velar por sus ciudadanos y proveerles vida, libertad y la consecución de
la felicidad, la responsabilidad política del Estado es esencial para
el bienestar de sus ciudadanos), las ONG's fomentan la idea
neoliberal de la responsabilidad privada en los problemas sociales y la
importancia de los recursos privados para resolver estos problemas.
En efecto, imponen una doble carga a la población pobre,
que continúa pagando impuesto para financiar al Estado neoliberal para
servir a los ricos, pero quedándole solamente la autoexplotación privada
para atender sus propias necesidades.
* Las ONG's se centran en proyectos, no en movimientos;
"movilizan" a la gente para producir en los márgenes, pero no para
luchar por controlar los medios básicos de producción y riqueza; se
centran en la ayuda técnica financiera de proyectos, no en las
condiciones estructurales que conforman la vida cotidiana de la gente.
Las ONG's y su equipo profesional posmarxista compiten
directamente con los movimientos socio-políticos para ganar influencia
entre las mujeres, la población pobre y la racialmente excluida.
La ideología y práctica de las ONG's desvía la atención de los orígenes y de las soluciones de la pobreza (mirando hacia abajo y hacia afuera).
La
ayuda de ONG's afecta a sectores pequeños de la población al generar
entre comunidades competencia por recursos escasos, que generan
distinciones insidiosas y rivalidades inter e intra comunitarias,
socavando así la solidaridad de clase.
Lo
mismo ocurre entre profesionales: cada quien crea su ONG para solicitar
fondos del exterior y compiten al presentar propuestas más convenientes
para los donadores ultramarinos, al tiempo que afirman hablar en nombre
de sus seguidores.
El
efecto final es una proliferación de ONG's que fragmenta a las
comunidades pobres en agrupaciones sectoriales y subsectoriales,
incapaces de ver el cuadro social más amplio que les aflige y menos
capaces aún de unirse en la lucha contra el sistema.
La
estructura y naturaleza de las ONG's, con sus posturas "apolíticas" y
su enfoque en la auto ayuda, despolitizan y desmovilizan a la población
pobre.
Las
ONG's refuerzan los procesos electorales alentadas por los partidos
neoliberales y los medios masivos de comunicación. Se evita la educación
política acerca de la naturaleza del imperialismo, de los fundamentos
de clase del neoliberalismo, de la lucha de clases entre explotadores y
explotados.
En
su lugar discuten sobre "los excluidos", "los sin poder", "la extrema
pobreza", "la discriminación racial" o de "género", sin ir más allá de
los síntomas superficiales del sistema social que produce estas
condiciones.
Al
incorporar a la población pobre a la economía neoliberal meramente a
través de "acción voluntaria privada", las ONG's crean un mundo político
donde la apariencia de solidaridad y de acción social encubre una
conformidad conservadora con la estructura de poder nacional e
internacional.
*
El crecimiento de las ONG's coincide con el incremento de su
financiación bajo el neoliberalismo y la profundización de la pobreza en
todas partes.
El intento de formular alternativas ha sido obstaculizado de otra manera también.
Muchos
de los y las ex-líderes de las guerrillas, de los movimientos sociales,
sindicales, y de las organizaciones populares han sido cooptados por
las ONG's. Algunos, sin duda, se han sentido atraídos por la esperanza
de que esto pudiera darles accesos a las palancas del poder.
De
cualquier manera, la oferta es tentadora: paga más alta (divisas),
prestigio y reconocimiento de donantes del exterior, conferencias y
redes en ultramar, personal de oficina y una seguridad relativa frente a
la represión. En contraste, los movimientos socio-políticos ofrecen
pocos beneficios materiales, pero mayor respeto e independencia y, lo
más importante: libertad para desafiar al sistema económico y político.
*
Las ONG's y sus Bancos patrocinadores del exterior (Banco
Interamericano de Desarrollo, Banco Mundial) publican boletines
resaltando las historias exitosas de microempresas y otros proyectos de
auto ayuda, soslayando los altos índices de fracaso a medida que el
consumo decae, importaciones baratas inundan el mercado y las tasas de
interés se disparan hacia arriba, como ocurre actualmente en México.
El
valor propagandístico de los éxitos microempresariales individuales es,
sin embargo, importante para fomentar la ilusión de que el
neoliberalismo es un fenómeno popular. La frecuencia de estallidos
masivos ocurridos en regiones de promoción microempresarial sugiere que
la ideología no es hegemónica y que las ONG's no se han desplazado aún a
los movimientos de clase independientes.
*
Las ONG's fomentan un nuevo tipo de dependencia y de colonialismo
económico y cultural. Los proyectos son diseñados, o al menos aprobados,
en base a los alineamientos y las prioridades de los centros imperiales
y sus instituciones.
Las
evaluaciones son hechas por y para ellos. Los nuevos virreyes
supervisan y aseguran conformidad en las metas, valores e ideología del
donador, así como del uso apropiado de fondos. Donde suceden los
"éxitos", éstos son fuertemente dependientes del apoyo exterior
continuo, sin el cual se colapsarían.
De
muchas maneras, las estructuras jerárquicas y las formas de transmisión
de "ayuda" y de "capacitación" se asemejan a la caridad del siglo XIX y
los promotores no son muy diferentes de los misioneros cristianos.
*
Pero mientras que el grueso de las ONG's es un creciente instrumento
del neoliberalismo, hay una pequeña minoría que intenta desarrollar una
estrategia alternativa que apoye el antiimperialismo y a una política de
clases. Esta última no recibe fondos del Banco Mundial, o de agencias
gubernamentales estadounidenses o europeas y apoya esfuerzos para
vincular el poder local con las luchas por el poder estatal.
Las
ONG's en esta minoría, conectan proyectos locales con movimientos
socio-políticos nacionales: al ocupar latifundios, defender la propiedad
pública y la posesión nacional contra las empresas multinacionales.
Proporcionan solidaridad política a movimientos sociales involucrados en
las luchas por expropiar tierras.
Creen
que las organizaciones locales deben luchar a nivel nacional y que los
líderes nacionales deben rendir cuentas ante los activistas locales.
* Examinemos algunos ejemplos del papel de ONG's y su relación con el neoliberalismo y el imperialismo es países específicos:
**BOLIVIA: En 1985,
el gobierno boliviano lanzó por decreto su nueva Política Económica
(NEP), congelando sueldos, eliminando los controles de precios y
reduciendo o eliminando los subsidios a los alimentos y los
combustibles. También creó las bases para la privatización de la mayoría
de las empresas estatales y el masivo despido de trabajadores del
sector público.
Recortes
masivos en los programas de salud y de educación eliminaron la mayoría
de los servicios públicos. Estas políticas de ajuste estructural,
conocidas como PAEs fueron diseñadas y dictadas por el Banco Mundial y
el FMI y aprobadas por los bancos y gobiernos europeos y estadounidense.
El número de bolivianos afectados por la pobreza creció
geométricamente. Le siguieron huelgas generales prolongadas y
confrontaciones violentas.
En
respuesta, el Banco Mundial y los gobiernos imperialistas suministraron
una masiva ayuda para financiar un "programa de alivio de la pobreza".
La mayor parte del dinero fue enviado a una agencia gubernamental
boliviana, el Fondo Social de Emergencia (FSE) que canalizó fondos a las
ONG's para implementar su programa.
El
número de ONG's creció rápidamente producto del financiamiento
internacional: en 1980 había cien, mientras que en 1992 se encontraban
530.
Casi
todas estas ONG's están orientadas para atender a los problemas
sociales creados por la política de libre mercado del Banco Mundial y
del Gobierno boliviano, a las que las desmanteladas instituciones
estatales no pueden responder.
De
las decenas de millones de dólares asignados a las ONG's, solamente el
15 al 20 por ciento llegó a los más necesitados. El resto fué desviado
para pagar costos administrativos y salarios de profesionales.
Las
ONG's con sus grandes presupuestos explotaron a los grupos vulnerables y
lograron convencer a ciertos líderes de la oposición que se
beneficiaron del arreglo.
Cuando
el magisterio público de La Paz se declaró en huelga protestando por
los sueldos mensuales de 50 dóllares y el hacinameinto en las aulas, las
ONG's la ingnoraron; cuando epidemias de cólera y fiebre amarilla se
propagaban en el medio rural, los programas de autoayuda de las ONG's
eran impotentes donde un programa de salud pública habría sido exitoso
en prevenirlas.
Las ONG's sí absorbieron a muchos de los intelectuales ex-izquierdistas y los convirtieron en apologetas del sistema neoliberal.
**CHILE:
Bajo la dictadura de Pinochet entre 1973 y 1989, las ONG's desempeñaron
un papel muy importante denunciando violaciones a los derechos humanos,
preparando estudios críticos del gobierno neoliberal y sosteniendo
ollas populares y otros programas de pobreza. Su número se multiplicó
con el advenimiento de las luchas populares masivas entre 1982 y 1986
que amenazaron con derrocar a la dictadura.
Del
total de 200 ONG's existentes en ese momento, cinco planteaban un
análisis y una exposición crítica de los vínculos entre las políticas de
libre mercado patrocinadas por el Banco Mundial y la tasa de pobreza
del 47 por ciento.
En
julio de 1986 se realizó una exitosa huelga general y se comenzó a
programar la transición electoral. Se forjó una alianza entre demócratas
cristianos y socialistas que luego ganó la presidencia.
Los movimientos sociales que jugaron un papel vital en el fin de la dictadura fueron marginados.
De apoyar a los movimientos, las ONG's pasaron a colaborar con el gobierno. Los profesionales demócrata cristianos y socialistas se convirtieron en ministros de Estado.
Las ONG's fueron instruidas por sus donantes extranjeros a terminar su apoyo a movimientos independientes de base y a colaborar con el nuevo régimen civil neoliberal.
"Sus
profesionales", una de las más conocidas ONG's de investigación,
realizó estudios sobre la "propensión a la violencia" en las barriadas, una información útil a la policía y al nuevo gobierno para reprimir a los movimientos sociales independientes.
La
mayoría de los líderes de las ONG's se convirtieron en funcionarios
gubernamentales, quienes cooptaron a líderes locales, al tiempo que
socavaban las asambleas de tipo popular en las comunidades.
Diversas
entrevistas a mujeres activas en la barriada de la Herminda revelaron
el cambio en el período pos- electoral: "las ONG's nos dijeron que
debido a que había llegado la democracia, ya no hay necesidad de
continuar los programas de ollas populares. Ustedes ya no nos
necesitan".
**BRASIL:
El Movimiento social más dinámico en Brasil es el Movimiento de
Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST). Con más de 5.000 organizadores y
varias decenas de miles de simpatizantes y activistas, ha estado
directamente involucrado en cientos de ocupaciones de tierras durante
los últimos años.
En una conferencia organizada en mayo de 1996, el papel de las ONG's fue uno de los temas de debate.
Un
representante de una ONG holandesa apareció en escena e insistió en
participar. Cuando se le dijo que la junta estaba cerrada, respondió que
tenía una propuesta para financiar (con 300.000 dólares) el desarrollo comunitario.
Más tarde el comité de mujeres del MST discutió en una reunión reciente con una ONG feminista arraigada en el medio rural. Las
mujeres del MST pugnaban por una perspectiva de lucha de clases que
combinará acción directa (ocupaciones de tierras) y lucha por reformas
agrarias con la igualdad del género.
El personal profesional de la ONG insistía en que las mujeres del MST rompieran con sus organizaciones y apoyaran un programa minimalista de reformas estrictamente feministas.
El MST distingue entre las ONG's que contribuyen al movimiento (dinero, recursos, etc) para financiar la lucha de clases, y las ONG's que son esencialmente aparatos misioneros que fragmentan y aíslan al campesinado, como es el caso de muchos proyectos de ONG's patrocinadas por el Banco Mundial, la Agencia Internacional para el Desarrollo de Estados Unidos (USAID) y los Pentecosteses.
CONCLUSIÓN
Los
managers de las ONG's transmiten la nueva retórica de "identidad" y
"globalismo" hacia el interior de los movimientos populares. Después de
una década de actividad en ONG's, estos profesionales han
"despolitizado" zonas enteras de la vida social: a las mujeres, los
barrios, y a las organizaciones de jóvenes. En Perú y Chile, donde las
ONG's se han arraigado firmemente, los movimientos sociales han
declinado.
*
Para justificar este enfoque, las ideologías de las ONG's a menudo
invocan el "pragmatismo" o el "realismo", citando el ocaso de la
izquierda revolucionaria, el triunfo del capitalismo en el Oriente, la
"crisis del marxismo", la pérdida de alternativas, la fuerza de EEUU,
los golpes y la represión de los militares.
Este
"posibilismo" es utilizado para convencer a la izquierda para que
trabaje dentro de los nichos del libre mercado impuesto por el Banco
Mundial y por el ajuste estructural, y para confinar la política a los
parámetros electorales impuestos por los militares.
*
El "posibilismo" pesimista de los ideólogos de las ONG's está
necesariamente cargado para un lado. Estos se enfocan en las victorias
electorales neoliberales y no en las protestas masivas pos-electorales y
en las huelgas generales que movilizan a un gran número de gente en
actividades parlamentarias.
Ven
el ocaso del comunismo a fines de la década del 80 y no el renacimiento
de movimientos sociales radicales a mediados de la década de los 90.
En
la década de los 90 ha sido testigo de una radicalización de las
políticas neoliberales, diseñadas para anticiparse a las crisis,
mediante la entrega de oportunidades aún más lucrativas de inversión y
especulación a la banca extranjera y a las multinacionales: el petróleo
en Brasil, México, Argentina, Venezuela; salarios más bajos y pagos
menores de seguro social; mayor exención de impuestos y la eliminación
de toda legislación laboral protectora de los trabajadores.
La
estructura de clase latinoamericana actual es más rígida y el Estado
está más directamente atado a las clases dominantes que nunca.
La
ironía es que los neoliberales están creando una estructura polarizada
de clases mucho más cercana al paradigma marxista de la sociedad que a
la visión de las ONG's.
*
Por esto el marxismo ofrece una alternativa real a las ONG's. Y en
América Latina sí existen intelectuales marxistas que escriben y hablan a
favor de movimientos sociales en lucha, comprometidos con compartir las
mismas consecuencias políticas.
Las
fuerzas de los intelectuales marxistas críticos reside en el hecho de
que sus ideas están en armonía con realidades sociales cambiantes.
La creciente polarización de clases y las confrontaciones violentas van en aumento y están a la vista.
Así,
mientras que los marxistas son numéricamente débiles en el sentido
institucional, son estratégicamente fuertes a medida que comienzan a
conectarse con una nueva generación de militantes revolucionarios, desde
los zapatistas en México hasta el MST en Brasil.
https://servicioskoinonia.org/relat/207.htm