El Gobierno de Nicaragua expresó este sábado su agradecimiento al 
Comité Europeo de Solidaridad, por el apoyo de informar, aclarar y 
defender a la Revolución Popular Sandinista.
Por Consejo de Comunicación y Ciudadanía
El Canciller Denis Moncada Colindres, expresó que los miembros de ese
 comité se han mantenido firmes e incansables, caminando al lado del 
pueblo nicaragüense y las fuerzas progresistas en el mundo, a pesar de 
las sistemáticas campañas mediáticas para descalificar el proceso 
popular y antiimperialista.
El objetivo de estas campañas es tratar de minimizar y desprestigiar 
los enormes y significativos avances que la Revolución ha alcanzado a 
favor del pueblo humilde y trabajador de Nicaragua, dijo Moncada.
Durante el Décimo Encuentro del Comité Europeo realizado este sábado,
 el canciller dijo que se reciben las muestras de solidaridad con 
Nicaragua, pero también expresó la inquebrantable solidaridad con los 
pueblos que hoy luchan por su libertad, soberanía y autodeterminación.
La actividad se realizó en Cataluña, con la presencia de 55 miembros 
de grupos de solidaridad de España, Italia, Alemania, Francia, Suecia y 
Dinamarca, y la participación virtual del Canciller Moncada.
Compañeras y compañeros:
Es para mí un honor especial poder dirigirme a ustedes en ocasión de
 transmitirles el cariño fraterno, de hermanas y hermanos 
revolucionarios de nuestros Copresidentes Comandante Daniel Ortega 
Saavedra y Rosario Murillo Zambrana, quienes desde el Gobierno de 
Reconciliación y Unidad Nacional y desde el Frente Sandinista de 
Liberación Nacional, continúan conduciendo a nuestro pueblo, gobierno y 
partido por el camino de dignidad que nos heredó nuestro General de 
Hombres y Mujeres Libres, Augusto C. Sandino.
Queremos expresar nuestro agradecimiento por la solidaridad, el 
cariño, el permanente trabajo que por tantos años ustedes vienen 
haciendo para informar, aclarar y defender a la Revolución Popular 
Sandinista.
Ustedes se han mantenido firmes e incansables, caminando al lado del
 pueblo nicaragüense y las revoluciones y fuerzas progresistas en el 
mundo, a pesar de las sistemáticas campañas mediáticas para descalificar
 nuestro proceso popular y antiimperialista, tratando de minimizar y 
desprestigiar los enormes y significativos avances que la Revolución ha 
alcanzado a favor del pueblo humilde y trabajador de Nicaragua.
Participamos en este evento recibiendo sus muestras de solidaridad 
con el pueblo de Nicaragua, pero también estamos aquí para expresar 
nuestra inquebrantable solidaridad con los pueblos que hoy luchan por su
 libertad, soberanía y autodeterminación.
Un pueblo que ha sido tantas veces y de distintas formas intervenido
 por el imperialismo norteamericano sabe de luchas y de victorias. Un 
pueblo que de su seno surge un Héroe Latinoamericano y Caribeño como 
Augusto C. Sandino quien enfrentó, derrotó y expulsó a los yanquis 
invasores de nuestras tierras, y cuyo ejemplo es el que hereda el Frente
 Sandinista de Liberación Nacional, sabe de luchas y victorias.
El FSLN da continuidad a la lucha antiimperialista de Sandino, 
conduciendo al Pueblo Nicaragüense hacia la hermosa victoria de la 
Revolución Popular Sandinista en julio de 1979, que muchos de ustedes 
recuerdan y desempeñaron un rol importante en su defensa en los años 80.
Precisamente por el carácter popular y antiimperialista de nuestra 
Revolución, es que el imperio no tardó en desatar una guerra 
contrarrevolucionaria, que destruyó el país en la década de los años 
1980, causando más de 50 mil muertos.
Muchos de ustedes recuerdan también el chantaje imperialista, otra 
forma de intervención yanqui en nuestra tierra, que trajo consigo la 
oscurana y la ruina del país en la década de los años 1990 e inicios del
 2000, hasta que el Frente Sandinista regresó al gobierno en 2007, 
iniciando una nueva etapa de la Revolución Popular Sandinista, marcada 
por la Luz de la Esperanza, por la Paz, la Reconciliación, el Progreso y
 el Bienestar del Pueblo Nicaragüense.
Bajo las banderas del Frente Sandinista, conducido por nuestro 
Comandante Daniel Ortega y nuestra Compañera Rosario Murillo, Nicaragua 
se encaminó rápidamente por la senda de la justicia social, de la 
restitución de derechos, del bienestar y la paz.
Nicaragua demostró que una Revolución Popular es capaz de mejorar la
 vida de su pueblo e impulsar el desarrollo, restituyendo los derechos 
arrebatados por el imperio, la oligarquía y su modelo neoliberal, 
manteniéndose firme y leal al pensamiento político Revolucionario 
Sandinista del que surge.
La lucha contra la pobreza es el elemento central del Plan Nacional 
de Desarrollo Humano, nuestro Plan de Lucha contra la Pobreza, que 
enarbola con firmeza la gratuidad de la salud y la educación como 
derechos fundamentales. El acceso a servicios básicos como el agua, 
electricidad, carreteras, hospitales, clínicas y escuelas comenzaron a 
llegar hasta las comunidades más lejanas, uniendo al país.
Para que se den una idea aproximada, en 2006 había 33 hospitales, en
 2025 tenemos 77; en 2006 habían 940 puestos de salud; en 2025 contamos 
con 1,432; habían solamente 20 Casas Maternas, hoy tenemos 178 en todo 
el país. La matrícula escolar pasó de 1.6 millones de estudiantes a más 
de 1.8 millones; de 0 alimentos en escuelas a 1 millón 200 mil raciones 
de Merienda Escolar; de 0 respaldo a las familias a 1 millón de paquetes
 escolares para estudiantes, 60 mil maletines para docentes; de 27 mil 
aulas en ruinas a más de 36 mil aulas nuevas y rehabilitadas. 
Observemos, en enero de 2007 en Nicaragua un 23% de Analfabetismo, desde
 2009, Nicaragua se declaró libre de analfabetismo. Y la lista sigue 
compañeros y compañeras y la lista aumentará progresivamente.
Hemos tenido grandes avances en el sector energético, más del 99% de
 cobertura eléctrica nacional. Somos el país más seguro de 
Centroamérica, y uno de los primeros a nivel de América Latina y el 
Caribe. Estamos entre los primeros en el mundo en equidad de género. 
Somos un País con estabilidad macroeconómica. En términos de soberanía 
alimentaria somos el único país de Centroamérica que produce 
aproximadamente el 90% de los alimentos que consume.
La acertada conducción del Frente Sandinista fue reconocida por 
nuestro pueblo en las elecciones nacionales, municipales y regionales de
 2016 y 2017, tanto que el imperio junto a los malos hijos de Nicaragua,
 los traidores de siempre, los oligarcas vende-patria de siempre, no 
pudieron esconder su miedo por tantos avances que se confabularon para 
facilitar una nueva forma de intervención yanqui en 2018, con el 
propósito destruir esta hermosa nueva página de la historia de nuestro 
Pueblo y tratar cumplir su objetivo central de destruir al Frente 
Sandinista y como dijeron en su momento “eliminar físicamente a los 
sandinistas”.
Financiaron, intervinieron, mintieron y manipularon a través de 
medios de comunicación y redes sociales, cometieron atrocidades y 
asesinatos contra el pacífico pueblo nicaragüense en un intento de 
desmantelar la Revolución a través de un golpe de estado, que falló por 
la firmeza de nuestro pueblo, de los trabajadores nicaragüenses, quienes
 enfrentaron esta nueva forma de intervención yanqui y sus aliados 
oligarcas, derrotándolos una vez más.
Una vez derrotado el intento de golpe de estado, nos propusimos 
profundizar las conquistas alcanzadas y defendidas por el Pueblo, 
fortalecer la defensa de la Revolución para que los intentos 
imperialistas y oligarcas nunca más pudieran siquiera asomarse por una 
pequeña rendija de la historia. Nos propusimos defender y consolidar la 
Revolución y lo continuamos haciendo.
En estos siete años después de la intentona golpista de 2018, hemos 
aumentado nuestra capacidad productiva y los ingresos del país, hemos 
construido más hospitales, más escuelas, más carreteras. Cada día 
brindamos y llevamos más servicios básicos a más comunidades. Hemos 
aumentado nuestra seguridad alimentaria sobre la base del compromiso y 
la enorme capacidad productiva de nuestros productores rurales. Hemos 
fortalecido nuestras medidas de seguridad y seguimos siendo el país más 
seguro de la región.
Este año reformamos la Constitución para fortalecer nuestro modelo 
de democracia popular y el protagonismo del pueblo como líder del 
proceso revolucionario. Para ello, alineamos las instituciones públicas 
de manera más clara y coherente para servir mejor a nuestro pueblo, 
permitiendo un mayor crecimiento económico, mayor seguridad y 
estabilidad social, así como la permanente restitución de los derechos 
de las familias nicaragüenses.
El pueblo de Nicaragua continúa comprometido con seguir 
fortaleciendo la Revolución Popular Sandinista, más aún, en este mundo 
acechado, amenazado y atacado por las fuerzas más oscuras de la 
historia, instaladas en los gobiernos neoliberales del norte global, que
 buscan imponer su modelo hegemónico unipolar y sus viciados 
pensamientos para tratar de detener los avances soberanos de los pueblos
 libres como Nicaragua.
Este mundo tan peligroso se caracteriza por el surgimiento de las 
formas más viles de explotación capitalista. Una ideología neofascista, 
que no respeta derechos, tratados ni acuerdos cuando se trata de desatar
 su destrucción sobre los pueblos y el planeta, para imponer su forma de
 pensar en nombre de la explotación, del lucro y la avaricia.
Estamos atravesando tiempos difíciles en el mundo, tiempos de 
profundas transformaciones y grandes desafíos, pero también tiempos de 
gran claridad sobre la necesidad de seguir trabajando hacia un mundo 
multipolar que emerge ante nuestros ojos, en lucha contra el 
unilateralismo y el hegemonismo imperial.
Un mundo multipolar que promueve la unidad, el diálogo, el 
entendimiento mutuo, mayor solidaridad y una cooperación mutuamente 
beneficiosa es necesario para la paz, el bienestar y la justicia. Un 
orden multipolar ajeno a las hegemonías y unilateralidades, libre de 
imposiciones neocoloniales, Imperiales y fascistas en el que podamos 
profundizar armoniosos lazos de amistad, con respeto a la soberanía, la 
independencia, la autodeterminación y la dignidad de los pueblos del 
mundo.
En estos tiempos de confusión y manipulación es imperativo reiterar 
el principio de que América Latina y el Caribe, el Mar Caribe, es una 
Zona de Paz y que ninguna potencia tiene el derecho de socavarla, 
intervenirla, desestabilizarla o agredirla para derrocar gobiernos 
democráticos populares y revolucionarios como Venezuela, Cuba y otros 
países hermanos.
Ustedes que “viven en las entrañas del monstruo”, como lo 
caracterizó José Martí, tienen que soportar las terribles consecuencias 
económicas, políticas, culturales y de seguriidad del imperante 
pensamiento neofascista y neoliberal. Expresamos nuestro respeto a 
Ustedes, quienes se mantienen firmes, fuertes y decididos a seguir 
luchando, desde adentro, por sus propios derechos y por los derechos de 
los Pueblos del Mundo.
Esta Revolución Sandinista tiene su máxima expresión de sacrificio 
en nuestros Héroes y Mártires, entre los que contamos, con especial 
reconocimiento y amor, a hermanos y hermanas que vinieron desde lejos en
 términos de distancia, pero muy cercanos en términos de pensamiento 
compartido, y que dieron sus vidas por la justicia social en nuestro 
país.
Hoy y todos los días reconocemos el trabajo que realizan a favor de 
la paz en el mundo. Muchos de ustedes han vivido entre nuestro pueblo y 
otros han visitado nuestro país impulsados por la idea de construir un 
mundo más justo.
En esta segunda etapa de la Revolución Popular Sandinista, los 
enemigos de la justicia, de la verdad y de los derechos del Pueblo son 
los mismos del pasado y debemos saber identificar y encontrar nuestro 
norte revolucionario y progresista, en medio de esa marea de falsedades y
 distorsiones de la verdad verdadera.
Nuestra historia está claramente dividida entre movimiento popular y
 pensamiento oligárquico. La decisión es clara entre el pensamiento 
oligárquico, elitista, privilegiado y racista, dispuesto a todo para 
mantener su poder y privilegios, incluyendo ser habilitadores de la 
intervención extranjera; y el movimiento popular que hereda lo mejor de 
la historia de lucha de nuestro pueblo. No hay medias tintas. En 
Nicaragua somos movimiento popular expresado en la Revolución Popular 
Sandinista.
En esta reunión, recordamos, celebramos y agradecemos la firmeza, la
 constancia y la permanencia de ustedes al lado del movimiento popular, 
al lado de la Revolución Popular Sandinista.
Con mucho amor. Con mucho agradecimiento. Seguimos construyendo Revolución.
Muchas gracias.